Cuando Sindy desapareció, Ian quedó devastado, nunca habría imaginado que tras haberla elegido, ella le abandonaría. Durante mucho tiempo, se ha dedicado a buscarla, pero como si la tierra se la hubiera tragado... no consigue encontrarla. Ahora dos años después, el destino la vuelve a poner en su camino y en sus manos, pero nada queda del amor que sentía por ella, en su corazón simplemente hay sitio, para el rencor y el dolor que, ella dejó con su marcha. Mientras él se empeña en menospreciarla y negarse a si mismo que la sigue queriendo, Sindy se da cuenta del error tan grande que cometió y decide luchar por lo que perdió y demostrarle que, solo ella sigue teniendo su corazón.