En Madrid, 2029. Lucía, una agente de la policía con sueños de ser escritora, lucha contra los fantasmas de su pasado en un mundo manchado por la guerra y las catástrofes naturales. En uno de sus días de trabajo, le asignan investigar la desaparición y asesinato de los niños de un orfanato, aunque para su pesar, acaba involucrándose en un misterio más grande que ella misma. En su investigación da con uno de los libros de Francisco Bornean, quien fue incitado por el diablo en 1963, a escribir cuatro manuscritos malditos. A partir de ese momento comienza a descubrir como esto se relaciona con su pasado, junto a su compañero Garrido, un ex militar que lucha con el pesar de haber participado en la guerra. Este libro cuenta con otra sub historia dentro de sus actos. En la que se muestra el mundo 47 años después de los acontecimientos de Lucía. Esta historia no teme su destino, si no que lo abraza. Todo está perdido en un mundo que tiene los días contados y cada personaje busca darle un sentido a su vida antes de desaparecer para siempre, y nuestras protagonistas no son diferentes. La felicidad y simpleza de la sub historia solo sirve, para que todo el verdadero mensaje que quiere entregarnos el libro no nos sature. En esta historia se deja ver un ambiente oscuro, ofreciéndonos una aventura de misterio, amor, terror y comedia, todo mezclado de manera homogénea en un relato magistral que embrujará al lector a medida que avance en la historia.