Amor, Desenfreno y Otras Estupideces es una novela basada más que todo en diálogos sobre la vida romántica de nueve personas. Cada persona interpreta el amor de distinta forma. No obstante; todos al final, buscan lo mismo: Una perpetua felicidad. Este ideal sin embargo se pone en cuestión cuando de pronto tienen que lidiar con algo inesperado, un crimen. Lo siguiente es parte de una conversación entre los personajes: Irenia: Te diré lo que pienso Kaylin. Imagina este escenario: La mujer vive perpetuamente en una isla, rodeada de agua y tiburones. No vemos a los delfines porque los tiburones se los han comido a todos o los han ahuyentado. Están fuera del alcance visual de la mujer. Iriel: Suena interesante... La vida de una mujer comparada a una celda sin salida. Me recuerda a Platón y la alegoría de la cueva. Irenia: Bueno... Yo he salido de la cueva. Ya no vivo en ignorancia. Ya no soy esclava del mundo diseñado por los hombres, para los hombres.